Laura Rodari
(Milán, Italia, 1968)
De formación autodidacta, su fotografía gravita en torno a las prácticas más experimentales. Trabaja principalmente con procesos analógicos y positiva ella misma sus negativos. Su obra incluye otros medios como el vídeo, la fotografía digital y el material instantáneo Polaroid. Desde 2015 forma parte del colectivo de arte fotográfico AM Projects junto a Oliver Pin-Fat, Tian Doan na Champassak, Olivier Pin-Fat, Hiroshi Takizawa, Thomas Vandenberghe y Daisuke Yokota.
Laura Rodari propone una práctica agresiva y salvaje que se aleja de los cánones tradicionales y de los estándares del positivado fotográfico. En su acercamiento hacia la materialidad de la fotografía, hacia la imagen-objeto del papel emulsionado, sus fotografías parecen cortadas a cuchillo, maltratadas y estropeadas durante el proceso de creación o directamente recuperadas de la papelera del laboratorio. Una experimentación extrema que no menosprecia la humildad del error, el uso de material sensible caducado o el reciclaje del collage. Fotografías pequeñas, tímidas y mínimas, rotas y fragmentadas que se muestran sobre cartones o carpetas viejas.
Su proceso creativo nos ayuda a reflexionar sobre la materialización y la desmaterialización de las imágenes, sobre la frontera entre lo visual y lo intangible. De la persistencia de la imagen latente más allá de la imagen revelada y sólida.
Según la propia autora, su trabajo Malia surgió tras una pesadilla perturnadora. La palabra italiana Malia significa hechizo pero con connotaciones negativas e implicaciones oscuras. 'Malia' también puede ser descrita como la misteriosa capacidad de conseguir efectos inusuales y desconcertantes a menudo de forma discreta y sutil, lo que hace que sea aún más engañosa.
Escribir la sombra de estos fantasmas en la cámara oscura del laboratorio es el núcleo y el crisol de sus fotografías.
Pich Aguilera (Mapa)